A veces me pregunto
como hay personas que se pueden ir a la cama y dormir tan
tranquilos.
Y no hablo de los grandes malignos de la historia, como Adolf Hitler, o de los que vemos en las noticias de vez en cuando. ¡Qué va! Hablo de los "pequeños hiltlers” que nos rodean, que no matan a nadie pero causan dolor, o lo pretenden.
Los hay que van de frente y se les ve el plumero enseguida. Lo mejor, salir huyendo en dirección contraria, si se puede, que no siempre es así. Hay otros, en cambio, que permanecen agazapados, sin dar muestras claras de su verdadera identidad y que un día, cuando menos te lo esperas...¡zas!... se retratan. Y tú te quedas con cara de gilipollas diciendo : “¿Cómoooo?”
Trastornos mentales a parte, lo que les ocurre a esta clase de personas es que tienen una ausencia total de empatía, que normalmente va unida a un egocentrismo desmesurado...vamos, que se junta el hambre con las ganas de comer.
Y no hablo de los grandes malignos de la historia, como Adolf Hitler, o de los que vemos en las noticias de vez en cuando. ¡Qué va! Hablo de los "pequeños hiltlers” que nos rodean, que no matan a nadie pero causan dolor, o lo pretenden.
Los hay que van de frente y se les ve el plumero enseguida. Lo mejor, salir huyendo en dirección contraria, si se puede, que no siempre es así. Hay otros, en cambio, que permanecen agazapados, sin dar muestras claras de su verdadera identidad y que un día, cuando menos te lo esperas...¡zas!... se retratan. Y tú te quedas con cara de gilipollas diciendo : “¿Cómoooo?”
Trastornos mentales a parte, lo que les ocurre a esta clase de personas es que tienen una ausencia total de empatía, que normalmente va unida a un egocentrismo desmesurado...vamos, que se junta el hambre con las ganas de comer.
La empatía es una de las
claves para una buena relación interpersonal, saber ponerse en la
situación del otro. El
ejercicio de ser empático no es tan sencillo, cuesta. Pero hay que intentarlo siempre. Cada vez. Salir por un momento de ti mismo, de tus intereses, y pensar en el otro , en los otros.
El problema está cuando ni siquiera se intenta. Cuando el otro ni siquiera existe.
El problema está cuando ni siquiera se intenta. Cuando el otro ni siquiera existe.

Yo creo que la empatía no se puede ejercitar, o la tienes o no la tienes y para poder tenerla no tienes que tener miedo a relacionarte con la gente, pues es en la profundidad de las relaciones cuando comprendes al otro.
ResponderEliminarLa mayoría de la gente que hace más o menos daño no siente que está atacando.
Uno nunca piensa de uno mismo que es un "hijo de la gran chingada", siente que se está defendiendo y que por eso está justificado lo que hace, los demás se merecen eso por osar a mirarle con desprecio ... bueno lo que tiene estar obsesionado es que da igual como te miren las bolas que son esos ojos tu interpretas según te pasa a ti.
Yo creo que tod@s dependiendo de como se sienta el otro de dañado por nuestras acciones podemos ser interpretados como pequeños hitleres, aunque sabiendo de quien hablas... ¡este es que está muy pero que muy mal! Pero quien no ha sentido a veces el tener que comportarse de determinada manera, pero lo ha hecho porque sus intereses o su dignidad o ... las sentía amenazadas. Supongo que hay que medir un poco, pero...
Esto es algo que se puede ver fácilmente en el trabajo cuando entra alguien nuevo que empieza a tener buena consideración por parte del que decide y cuyas funciones pueden solaparte con las de otro. Ese otro seguramente se sentirá amenazado y si encima considera que el otro es competente intentará demostrar que el también, se siente amenazado... bien porque es de donde obtiene la financiación para su comodidad o la de sus hijos y bien porque aspira a un ascenso que le pueden quitar... Yo he visto esto muchísimas veces en la oficina y a veces empiezas a ver fantasmas que no hay y se te dispara la medida de la reaccion o esta tiene un componentes inconsciente demasiado grande. Es triste pero si te miras internamente en una profundidad grande, lo cual no es habitual y además es bastante difícil, estamos todos llenos de miedo. No porque estés defectuoso si no por que es así como nos educan. Y en la medida de tu miedo, así será la agresividad en tus reacciones. Cuanto más miedo, peor...
Creo que desgraciadamente y debido a esto entramos en el juego de los peores, y cuando estamos fastidiados, además, ellos se sienten importantes... y la bola sigue girando.
A ellos, a los más miedosos, a los más inseguros, a los más feos en general, no les vamos a eliminar y tampoco podemos cambiarlos. Pero ahora son ellos los que están jugando con nosotros, tal vez si no nos lo tomaramos tan en serio y jugaramos nosotros con ellos... o pasar de jugar y de sufrir por los fantasmas que pintan delante de nuestra cara. O entrenas estrategias o ni te lo plantees, si no vas a hacer nada para que sufrir. Se puede aprovechar y observar concienzudamente para aprender, el aprendizaje siempre es algo positivo y eso transforma la situación para ti. Y si pasa algo... un par de hostias y esa noche duermes como un lirón ... jajajajajaja Al fin y al cabo, cuando las cosas valen caras...uno se lo piensa, pero la opción sufrir, amargarse etc. ¡no! Esa es su gasolina. :P
Es una opinión... gracias por compartir todas estas cosas que compartes en el blog.
Prometo intentar ser más breve en lo sucesivo... ;) uy! he dicho "intentar" :P
Sí, llevas razón, la empatía se tiene o no se tiene. Pero cuando he utilizado el sustantivo ejercicio, me refería a ejercer o a poner en práctica. Lo que digo después: salir de ti mismo y de tus intereses. Y eso, en algunos momentos, no es fácil. Es algo que tienes pensar, meditar. Pensar en los efectos colaterales dañinos que pueden producir en el otro tus acciones, que algunas veces no puedes evitar , pero que al menos debes intentar minimizar. Pararte a pensar en cómo hacer las cosas, y hacerlas, pero mirando siempre de reojo a los que te rodean. Y sí... ese del que piensas que hablo, efectivamente, es un ejemplo de pequeño hiltler. No obstante este post no era personalizado, era una reflexión general.
EliminarGracias a ti por tu comentario. Por cierto...intentar ser breve? Tú? ....:P
(RECTIFICANDO EL PRINCIPIO DE MI COMENTARIO) Yo creo que la empatía no se puede ejercitar, o la tienes o no la tienes y para poder tenerla no tienes que tener miedo a relacionarte con la gente, pues es en la profundidad de las relaciones cuando comprendes al otro. En la que te sientes uno con el otro. Y eso es la empatía. Es algo fenomenológico. No algo que piensas o razonas. Creo que para poder tenerla tienes que enfrentarte a tus miedos, aceptarlos y de ahí surge una experiencia de vida si te lo permites que no hace que te estés protegiendo del otro.
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